Joaquín Guzmán Loera –mejor conocido como “El Chapo Guzmán” –, líder del Cártel de Sinaloa y principal traficante de drogas de México, se fugó del Penal de máxima seguridad del Altiplano en Almoloya, Edo. de México, el 11 de Julio de 2015 a las 8 h. 52 m. P.M. Su fuga conmovió a la nación y tuvo resonancia internacional. Se efectuó a través de un túnel de más de un kilómetro de extensión que fue excavado desde el exterior hasta su celda de reclusión. Como es sabido, la Astrología establece una relación significativa entre los eventos del acaecer terrestre y su entorno cósmico natural, es decir, entre cualquier acontecimiento que tenga lugar en la Tierra y el ordenamiento planetario que coincide con él tal como es percibido desde nuestra perspectiva geocéntrica. Se trata de una correspondencia entre fenómenos de un orden distinto pero coincidentes en el tiempo conocida como sincronicidad. La carta astral que se erige en el momento exacto de un evento determinado se le conoce como “Carta Horaria”.
Fuga del Chapo Guzmán
11 de Julio de 2015 (8:52 P.M.), Edo de México.
La Astrología Horaria (en cierta manera una extensión de la Astrología Natal) nos permite no solo comprobar la validez de esta ciencia sino conocer mejor muchos aspectos no siempre evidentes en los sucesos y experiencias personales. En la Astrología Horaria, las Casas (los 12 sectores del cosmograma) representan las circunstancias que conforman el evento, y los aspectos de los planetas (sus relaciones angulares), la manera cómo esas circunstancias operan. De los 10 cuerpos celestes que intervienen en la composición de una carta astral, la Luna puede servirnos aquí como un factor inicial de su interpretación, ya que supuestamente representa la acción principal que está teniendo lugar en ese momento. En el horóscopo que analizamos, la Luna aparece situada en la Casa IV, sector relacionado con las áreas habitacionales y los espacios fijos de ubicación. Alude, por consiguiente, a la celda de reclusión en la que el Chapo estaba confinado. En la cúspide de esta Casa está el signo de Tauro, confirmando sus condiciones de inmovilidad y estrechez. Pero la Luna está ya en el primer grado del siguiente signo de Géminis, relacionado con la movilidad y los desplazamientos, separándose así de su anterior vinculación con el signo estable de Tauro. Géminis es asimismo el signo de la comunicación, confirmando la acción inicial del Chapo hacia el exterior (un extenso recorrido subterráneo de más de un kilómetro que debió realizar desde su celda hasta el punto de su liberación final). La Luna forma un aspecto de oposición con el planeta Saturno (la autoridad y el orden institucional) ubicado en la Casa X (proyección hacia el exterior, imagen pública). Saturno rige la Casa XII (por Capricornio), el sector vinculado con las prisiones y sitios de confinamiento, y la Luna a su vez la Casa VI (por Cáncer), relacionada con los servicios de control del Estado. Todo esto pone en evidencia un conflicto de autoridad, un desafío al orden institucional que en ese momento está teniendo lugar y que alcanzó un despliegue espectacular. Proyecta la esencia del conflicto: la efectividad o .vulnerabilidad de las instituciones responsables del control carcelario.
La distribución general de los planetas en esta carta se organiza en dos configuraciones principales: dos Cuadraturas en T que comprometen prácticamente la totalidad de los planetas (9 de los 10 que la conforman). La Cuadratura en T es una figura triangular integrada por un eje de oposición (180°) y dos cuadraturas conectadas con él (90° cada una). La primera de estas dos combinaciones planetarias la constituyen la Luna y Saturno en eje de oposición que hemos examinado ya, formando cada uno un aspecto de cuadratura con la conjunción de Venus y Júpiter en la Casa VII. El reto esencial planteado por esta distribución pone en evidencia una vez más lo que la acción del evento tuvo como su motor esencial, ya que la Casa VII indica en un horóscopo las alianzas y las confrontaciones. La segunda Cuadratura en T describe con impresionante claridad el reto manifiesto del evento que está teniendo lugar: la liberación sorpresiva del Chapo Guzmán. Plutón (relacionado con el poder, el liderazgo y también con el narcotráfico) se encuentra en la Casa XII (cárceles y sitios de confinamiento). El planeta, que representa al líder encarcelado, forma un aspecto de oposición con Mercurio, Marte y el Sol situados en la Casa VI la cual, como ya mencionamos, rige las instituciones de control del Estado. Plutón tiene a su vez una cuadratura con el planeta Urano (símbolo de la libertad y de las acciones sorpresivas) lo que expresa la liberación imprevista del más poderoso líder del narcotráfico en un escenario de confrontación y luchas de poder. En Urano se confirma el contenido manifiesto de este evento: la fuga y liberación exitosa del Chapo Guzmán. Urano en la Casa III (sector relacionado con los desplazamientos y la comunicación, en este caso de carácter sorpresivo e inusual) pone en evidencia cómo dicha liberación se efectúa: el planeta integra un aspecto de trígono (120°) con los planetas Venus y Júpiter situados en la Casa VII, lo que confirma el éxito de la fuga así como el apoyo de socios y colaboradores que ayudaron a la evasión. Otra indicación interesante: Plutón forma también un sextilio (60°) con Neptuno, planeta relacionado con lo oculto y secreto, significado reforzado aquí por su posición en el signo de Piscis. La posición de Neptuno en la Casa II de la economía y las finanzas alude a la oportunidad de realizar acciones y transacciones económicas ocultas relacionadas con la fuga, que tanto pueden representar los apoyos financieros del Chapo como la oferta millonaria también secreta ofrecida por su captura. Neptuno forma además un trígono con la conjunción de los planetas Mercurio y Marte (Casa VI) lo que sube al escenario el éxito fácil de las gestiones e iniciativas económicas asociadas con la evasión.
Como una expresión condensada del espacio-tiempo en que un evento tiene lugar, las distancias interválicas de la Luna (significadora de la acción del momento) con los planetas de la carta, indican probabilidades de manifestación de las acciones relacionadas con ellos. Así, la oposición de la Luna con Saturno –el conflicto entre la acción delictiva del fugitivo y el poder controlador de la autoridad y la ley–, contiene a su vez la expresión del tiempo probable en que dicha confrontación puede alcanzar una resolución. En otros términos: la distancia zodiacal de la posición de la Luna (0° Géminis) con la posición de Saturno (28° Capricornio) es de 178°. Cada grado representa un día (el timing en la Astrología Horaria) y en el caso presente, equivale al ciclo lunar que se extiende del 11 de Julio del 2015 al 5 de Enero del 2016. En esta última fecha se confirmó la llegada del fugitivo a su nuevo escondite y se procedió a implementar el operativo de su rescate. Tres días más tarde se hizo el anuncio oficial de su reaprehensión.
Es ilustrativo mencionar, por último, otra confirmación elocuente de esta liberación inesperada. Nos referimos a los símbolos asociados con los grados zodiacales. De acuerdo con la tradición astrológica, a cada uno de los 360 grados del zodíaco se le atribuye un símbolo con un significado particular. Urano, el planeta en el que se concentra la acción libertadora del Chapo Guzmán, está situado en 20° 24” de Aries. El símbolo asociado a este grado zodiacal, de acuerdo con la interpretación de Dane Rudhyar (An Astrological Mandala), es el siguiente: “Un pugilista entra al ring”. Comenta este autor: “La potencia inherente a cualquier liberación de poder… de un PODER ABRUMADOR”.
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